Tras casi 13 horas de vuelo, ya me encuentro en Asunción (Paraguay). Un viaje largo para un reto enorme, dirigir a las dos selecciones nacionales del país en los próximo Juegos Sudamericanos.

Llegada al aeropuerto, donde me esperaba el vicepresidente de la Confederación y el presidente de uno de los clubes semifinalistas del Top 5, todo atenciones y muestras de hospitalidad por parte de la gente. Ya uno se va dando cuenta de algunos aspectos del país,  coches sin matrícula, caos de circulación, gente que esta pendiente de que le des una limosna en todos los sitios…etc.

Comida a las 12:30, tendré que habituarme, donde me pusieron al día de la situación baloncestística del país la capitana del combinado femenino, Paola Ferrari, Christian Viveros (entrenador del Olimpia) y el mítico exjugador paraguayo y ahora asistente de la selección femenina, Santiago Ochipintti.

Tras una pequeña siesta en mi hotel, La Mansión Suiza, un pequeño hotel rural y familiar donde me tratan de maravilla, ya me dirigí a ver el entrenamiento de uno de los finalistas del Top 5 que el lunes comienza la final. Su entrenador es Christian Viveros, y será mi ayudante en la selección absoluta masculina.

Tras ello, una «picada» (picoteo en España), con varios entrenadores y dirigentes del basquet del país, y fin de jornada.

Hoy toca ver más entrenamientos de chicos y chicas para ir observando todo lo que pueda para la primera lista de las selecciones, entretanto, comida con mi presidente, el señor Bedoya, donde me entregará mi auto (como dicen aquí) y mi celular…

Ya habeís visto qué poco he parado, pero aún así me ha dado tiempo a saber que el Guaraní es el nuevo campeón de la liga de futbol, tras más de 60 años!!