Resulta que el «chico blanco» que acompañaba a las «megatléticasuperestrellas» de la selección USA que se proclamó Campeona del Mundo el pasado verano en Turquía se está haciendo ver en la NBA. Kevin Love ha batido el pasado lunes contra Dallas el record del mítico Mo Malone de mayor cantidad de dobles-dobles consecutivos, 51, en puntos y rebotes. ¡Y no parece que tenga intención de parar! Destaca también en una de las interesantes estadísticas que ofrece la NBA, Puntos+Rebotes+Asistencias, apartado en el que es segundo de la liga sólo por detrás de Lebron James y superando a nombres ilustres todos como Blake Griffin, Kevin Durant, Dwight Howard, Amaré Stoudemire, Derrick Rose, Wade, Carmelo Anthony,… Y además es el máximo reboteador de la NBA con una media de 15’7 por partido (11 defensivos).

En el video que os ofrezco a continuación hay algunos ejemplos de cómo rebotea, tanto en defensa como en ataque. Es uno de esos jugadores que parece tener manos magnéticas que atraen al balón, aunque una vez más, el trabajo que realiza sea probablemente la causa de su gran habilidad reboteadora. En ese trabajo podemos destacar las siguientes características:

– En defensa, con y sin balón, fija muy bien a su atacante usando el cuerpo y su peso, y no le deja aproximarse al aro, creando un espacio que después él utiliza para lanzarse por el balón.

– Se posiciona muy bien. Lee la trayectoria del balón y anticipa su posición, tanto en defensa como en rebote de ataque.

– Es duro y agresivo a la caza del balón. Fija perfectamente su atención en él tras superar a su oponente y nada parece detenerle.

– Excelente primer pase tras rebote defensivo. Facilita muchos contraataques.

– Lee bien la defensa tras rebote de ataque para finalizar él o pasar al hombre libre. Buena lectura de su defensa en ayudas para ir al palmeo.

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